23.1.25

Hoy no

 Hoy existimos. Seguimos vivos. Seguimos respirando.


Leí mis últimos escritos y no puedo creer cómo todo se fue aún mas al fondo del pozo en el que me encontraba. "Terapia" decían muchas veces pero me pasé un año en terapia y aunque aprendí a no morir en vida, tampoco estaba viviendo.

Viví 3 meses (otra vez) en el otro continente, y hubo días donde no podía respirar.

El año pasado aparté a Gerardo cuando Chuy me dijo que quería arreglar nuestra relación. Creí que era lo mejor, pero Chuy encontró la manera de destruirme día con día, semana con semana, evento con evento, incluso cuando viví fuera. Busqué nuevamente a Gerardo para recibir dos mensajes donde explicaba visceralmente como realmente se sentía, y corté toda comunicación con él. Antes de irme, Chuy la eligió 2 veces, negó en mi cara 2 veces amarme y querer estar conmigo. ¿Qué más necesitaba ver? Me estaba subiendo al avión y yo solo me rompía por dentro, como la primera vez. ¿Qué sería de él? ¿Quién lo iba a cuidar? ¿Quién lo iba a abrazar cuando se sintiera triste? Siempre proyectando mi sentir en los demás. Mientras yo suplicaba por llamadas que me viera, que me escuchara, que no colgara, Chuy solo me ignoraba para salir con la misma persona que incluyó en su venganza contra mí. 

"Mira, mejor cada quien por su lado, ya no trabajaremos juntos, y es más, cuando regreses ni me avises" Justo cuando pensaba que no podía romperme más, lo logró. Me cuesta admitir que ya no siento lo mismo que antes, como si fuera una planta que se secó. Y regresé y nos volvimos a ver.


"Conocí a alguien". Tuve que confesarme.

Su nombre es Daniel. 


Vivo ahogada en la incertidumbre de no saber si estoy haciendo lo correcto, un miedo inmesurable al afecto de alguien más, la serie de preguntas sin respuesta que no me dejan dormir: ¿Habla en serio? ¿Me quiere? ¿Está jugando? ¿Seré su nuevo pasatiempo? ¿Será sincero? ¿De verdad cree en lo que dice?


Por otro lado, ¿Qué pasará con Chuy? Tal vez es mi propia idea de él, que le cuesta tanto abrirse, si lo dejo, si me aparto ¿Estará bien? No quiero que sufra, ¿Se sentirá solo? No quiero que esté solo, ¿Volverá a reír?


La serie de preguntas que se atoran en la garganta, la sensación de perderlo todo que hace que truenen los dientes al dormir, el vacío donde alguna vez hubo amor y ahora solo hay oscuridad, la máscara de forzarme a disfrutar cuando aún me siento triste, hecha ovillo en el piso negro y frío de madera, dentro del círculo de gis blanco, donde aguardo el regreso de mi padre, como la pequeña princesita. Ahí estoy. 

Hoy estamos bien, estamos en la parte alta de la montaña.

5.3.24

Nobody's here.

 Este es el resumen de lo que ha pasado:


Tuve un sueño donde todo estaba bien. Un día todo iba a estar bien.


Cuando Chuy entró a mi vida siendo un amigo, lo único que faltaba es que el alcohólico de mi ex se fuera. Todo parecía encontrar la forma de acomodarse: aquellas piezas del rompecabezas de mi vida empezaban a ponerse en su lugar.

Fueron momentos bellos. 


Aunque me dolía haber dejado a Lino, sabía que era lo mejor para mí. Ya no podía aguantar otro fin de semana cargando con él, con su alcoholismo, con las marcas en mis brazos, con sus groserías y humillaciones, con los gritos en su casa y los gritos dentro de mi cabeza. No había alegrías junto a él, solo estas vueltas de las manecillas del reloj que llamábamos vida.


Y cuando hizo click esa pieza, solo dejé de sentir por él. No más tristezas, no más angustias, no más momentos incómodos. Y eso lo hizo fácil. Incluso cuando recapitulé muestra relación y todos los puntos ciegos salieron a la luz, con sus infidelidades y su morbo hacia las demás personas, sin distinguir entre sexo, estatus, religión, ni siquiera en ese momento me dolió. Pero me dolía saber que iba a estar solo.


Y dejé entrar a Chuy a mi vida: a esta habitación en desastre pero con un cierto orden, algo parecido a mi habitación actual. Basta decir que lo que sucedió después fue haber convertido mi cabeza en la caja de Pandora, y Chuy la abrió. El punto donde el candado se abrió fue haber perdido a mi papá. ¿Cómo se atrevió a dejarme así en este mundo, sabiendo el caos en mí e ignorándome conforme pasaban los años?

¿Cómo se atreve?

Yo estaba sola, perdida, tratando de ser fuerte, fingiendo que no me desgarraba por dentro, siendo la que se ocupa de los demás, la que cuidó (precariamente) de los demás, olvidándome completamente de mí.

 Y me quedé. Me quedé cuando me hicieron a un lado, cuando me engañaron teiendo sexo en mi casa, en mi cama, junto a mis cosas, mínimo 3 personas antes de ver el primer vídeo de lo que se volvería el calvario de mi vida. 

Y me quedé.

Me quedé cuando me desgarraba por dentro, cuando las luces se apagaban pero no el llanto en mi cabeza, cuando Chuy me ignoraba pero sentir su piel junto a mí , totalmente obligado, disminuía el ruido en mí, Fui su amante, su compañera, su amiga, su niñera, la pseudo mamá de sus hijos, la cartera, la cocinera, la ama de llaves, la solución a sus problemas... Pero jamás un amor, aunque haya sido pequeño, mísero, casi imperceptible. Nunca.

Me quedé incluso al verlo llegar después del (quien sabe qué número habrá sido) vídeo siendo infiel. A este punto, ya me había aprendido los anteriores; cómo las sostenía de la cintura, cómo acariciaba sus pechos, cómo las jalaba del pelo y les besaba la oreja mientras dejaba salir su placer en ellas y ellas en él.

Muchas de las veces, ya llegaba él cuando no había mas lágrimas que derramar, cuando la boca me sabía a sal y tierra.


La gente me pregunta "¿Por qué eres tan delgada?"

¿Cuándo les voy a poder decir la verdad?

Hace años que dejé de comer. Quería ser delgada, tener el control de mí. ¿Quién iba a querer a una mujer sin curvas, rellena como manzana, con acné y malos cortes de cabello? Que al sonreír, dolía más el alma.

"Usted no quiere ser bonita", me dijo el dermatólogo. 

¿Cómo explicarle las miles de noches en un hueco del tiempo donde no dolía nada, y me encontraba ahí, como la señorita que siempre fui: cumpliendo órdenes y acabando actividades propuestas aunque no me gustaran, haciendo pozos en la piel, sangrando sin dolor, abriendo la piel cada vez con los utensilios menos adecuados? No importaba dónde fuera, si la cara, los brazos, el cuello, la nuca, el abdomen, el pecho, las ingles... Siempre encontré una justificación a cada acto violento sobre mí. ¿Cuándo paraba? Cuando la sangre manchaba completamente el lavabo. Y de ahí seguía aguantar semanas, meses, hasta que la piel sanara, porque tengo mi lenta cicatrización.


¿Por qué aguantaste tanto tiempo a Chuy?

Mi vida, si me aguanté semanas sanando a piel, escuchando gritos de muchachos en el camión, burlándose de mis heridas y del nuevo acné que salía... Si aguanté los golpes hasta que se cansaba... Si aguanté los episodios y su alcoholismo... Podría aguantar sin problema la semana en que Chuy era un imbécil y luego regresaba a portarse decente conmigo, normalmente porque necesitaba un favor de mí, algo económico o sexual, y luego regresaba a ser el imbécil de siempre, hasta que se le presentara una nueva conquista, y regresaba después de coger con ella como vil perro arrepentido con la cola entre las patas.


La comida sabe a tierra, durante semanas, meses, años. El día que enfermé pensando que era covid, alimentarme no fue difícil, la comida no tenía sabor desde antes.

"¿Qué quieres comer?" La eterna pregunta. "Lo que sea, de todas maneras no tengo hambre". Mentira.


¿Sabes el infierno de querer hacer algo y no tener la voluntad? Extraño los días buenos, la parte alta de la montaña rusa. Esos días donde bailo, canto, corro, vivo, como y sueño.

¿Alguna vez has tenido pesadillas? Imagina vivir con pesadillas. El insomnio es para no estar en ellas, para no soñar con la muerte que alcanzo y aun así me doy cuenta que sigo sola. Era mucho mas fácil estar despierta.

Pero luego estar despierta se volvió el mismo infierno.


Dejé que Gerardo entrara a mi vida. Encontraba paz, me abrazaba como si el mundo estuviera a punto de acabar pero no a su lado, a su lado nada malo ocurriría. Y lo que mi alma y cuerpo necesitaban lo encontré en él: me sentía deseada, cuidada, amada y protegida.

Quise explicarle las voces y la falta de voluntad, pero no encontraba cómo, y cada día se volvió más difícil.

Chuy sólo me demostraba lo abandonada que estaba y me dejé querer.


Soy un monstruo como Yael me llamó, 

un cáncer de la sociedad como Lino dijo, 

soy tan mala y tan cruel como Arlen y Chuy comparándome el mismo demonio con él y su peor evento vitalicio, 

soy tan mierda y ojete como Gerardo describió mi comportamiento,

me da asco tu persona, como Eduardo escribió,

eres tan inútil, egoísta y egocéntrica, como mi papá me decía en sus constantes enojos...


El universo sabe que traté de redimirme. Y eventualmente todos me dejaron.


Estoy sola. 


Incluso cuando el único que no se "fue" era Chuy, hoy que me siento tan mal en salud, tan sola en esta casa nueva, él no pudo escuchar un audio mío, uno que suplicaba que se quitara de la puerta de mi vida, porque nadie entra y nadie se queda.


Estoy sola.


Estoy sola.


"¿Qué pasaría si algo sucede conmigo? Nadie va a poder abrir la puerta. Nadie estará conmigo. Nadie."


Estoy sola.


No todas las cartas suicidas parecen cartas suicidas. Algunos son recuerdos en la pared, otros pueden parecer detalles quisquillosos en la comida, otros son cicatrices, otros son las miles de lágrimas derramadas, otros son escritos en un blog que nadie lee.


Seguramente volveré a escribir. Si no morí en sus manos ni en el fuego cruzado, un día de enfermedad severa no acabara con esta vida que desea encontrar el final. Solo quiero volver a soñar, con los ojos abiertos.

10.10.23

El sueño de Gerardo

 "Ojos bonitos"

Ella se sostenía tan fuerte de ese trozo de cuerda qué colgaba. La cuerda se veía dura, vieja, de un color cobrizo oscuro. Tras una inspección más cercana, estaba llena de sangre. Eso era lo que le daba el color tan curioso. Había sangre muy vieja, habia sangre coagulada y había sangre fresca. Venía de sus manos. Se había estado aferrando tan fuerte a la cuerda, qué sus manos estaban llenos de ampollas. Algunas ya eran callos duros, insensibles. Otras recientes, qué le causaban incomodidad y miedo de apoyar con más fuerza, y unas recién reventadas, qué le causaban un obvio dolor constante, el cual estaba escondiendo detrás de una sonrisa. Lo que la delataba eran sus ojos. Hermosos ojos verdes. Con tonos rojos, pues estaban llenos de lagrimas, de frustración. Hinchados de haber llorado tanto tiempo. Pero la sonrisa no se desaparecía. Llevaba una blusa negra sin mangas, un pantalón negro y estaba descalza. 

Noto mi presencia debajo de ella. Con una voz suave, amable, tratando de proyectar normalidad:

-"Hola".- Su voz, a pesar de su esfuerzo por esconderlo, temblaba.

 - "Hola.... Estas bien?" - fue mi respuesta. 

-"Si, estoy muy bien".- Sonaba exhausta. 

-"Qué haces allá arriba?" le pregunte. Me miro por un tiempo en silencio, su cara, entre una confusión y una sonrisa incomoda.

- "A que te refieres? Donde más voy a estar?" - 

- "Parece que duele estar ahí arriba" - 

Sus manos se movían nerviosas en la cuerda. Sus pies, apoyados en un nudo al final de la cuerda. Nudo viejo y pequeño, qué no ofrecía mucho soporte. Echo una mirada rápida hacia abajo y se aferro a la cuerda con las fuerzas qué aun le quedaban. 

- "Estoy bien" - 

- "Por que no bajas?" - 

Me miro con una incredulidad. 

"Por que iba a hacer eso? Te dije que estoy bien" 

Era obvio el ligero tono de molestia en su voz. 

Analize la situación un poco. El piso, duro y de un negro liso. No estaba realmente tan alto. La caída si la lastimaría, pero no sería fatal. Acaso el prospecto de más dolor era tan insoportable qué ni siquiera consideraba la posibilidad de bajar de ahí? Por otro lado, la cuerda se veía podrida, deshilachada. El nudo sobre el cual apoyaba sus pies estaba desgastado de tanto tratar de apoyarse y resbalar. Era obvio que no la sostendría por mucho más tiempo. 

-"Me preocupa que caigas y te lastimes" - 

-"No te preocupes, estaré bien. Ya estoy acostumbrada. Tengo años aquí" - 

Como podía alguien durar años en esa situación? 

Voltee hacia abajo de ella. En efecto, trozos de cuerda muy vieja que se fueron rompiendo y gotas de sangre completamente secas adornaban el piso. 

-" Creo que estarías mejor aquí abajo, no crees? Te vendría bien un respiro. Un descanso" - 

Se quedo en silencio. Sus manos apretaron más la cuerda. 

-" Por que no bajas?" - 

-" como se supone que voy a bajar?" - el tono de molestia era más evidente. 

Busque alrededor algo que pudiera acercarle para que se apoyara y bajara. No había nada en ese cuarto. 

-" Podrías soltarte y yo te atrapó" - 

-"estas loco? No puedo soltarme" - me dijo con una obvia frustración en su voz. 

-"por que?" - 

-"si me suelto me muero" - 

Aunque era obvio que una caída así no la mataría, por que ella pensaba que si? Era probable por los restos de cuerda en el piso qué ya había pasado antes, y que había vuelto a subir. Pero antes había más cuerda. El piso... Fue entonces cuando entendí. 

El piso, negro y completamente liso, desde arriba, probablemente se vería como un vacío, un abismo infinito al qué si caes, no habría retorno. Como no entonces, caer presa del miedo y aferrarse a lo único que tenia a su disposición, por más daño que le causase? 

-" no te vas a morir" - 

-"si me suelto, caeré y te voy a lastimar" - 

-"confía en mi" - 

-"aquí estoy bien" - 

-"es bastante obvio que no est.."-

-"dije que estoy bien, si?"- grito. Empezaron a rodar lagrimas por sus ojos. Dos lagrimas cayeron. Las vi caer y una aterrizó sobre mi rostro. Me dolió. Fue un dolor muy familiar. 

Eran lagrimas pesadas. Vi como apretó las manos aun más. 

-"no te preocupes por mi. Estaré bien" - 

-"te creo. Veo que eres muy fuerte, para aguantar esta situación tanto tiempo. Pero todos necesitamos un respiro. Tal vez estar ahí no sea lo mejor" - 

-"Y a ti que? Por que te preocupas por mi? No lo hagas. Solo te vas a lastimar si me atrapas" - 

-"si, es probable que me duela. Pero quiero que estés bien, y puedo soportarlo, para que bajes" - 

-"no tienes por qué hacer eso por mi" - 

-" no tengo que, pero quiero" - 

-"por que?" - 

-"por que te quiero" - 

Era obvio que no esperaba esa respuesta. Al grado qué sus manos temblaron con duda. Se quedo en silencio. Se había acostumbrado tanto a ese dolor pequeño pero constante, ya se había insensibilizado a el, que la posibilidad de sentir un dolor mayor al caer, la asustaba. El no saber que pasaría, la incertidumbre. Pero ahora la duda entro. Y si la atrapaba? Y si no tenia que seguir ahí arriba? Soltó una de sus manos y la vio. Tenía años sin verse las manos. Llenas de cicatrices, de callos, raspones, ampollas, de sangre. Como fue que no lo vio? Que no lo sintió? Que no le importo?.

En ese momento, por mera casualidad del universo, o por disposición divina, la cuerda se rompió. 

Cayó unos segundos, qué para ella se han de haber sentido como meses. 

La vi caer en cámara lenta. Me acerque con cuidado. Cuando estaba cerca del suelo, puse mis brazos alrededor de ella. Si, dolió recibir su peso, pero estaré bien. Pude ver su cara de dolor al recibir el impacto de la caída, pero también vi como se mitigo rápidamente, pues por fin pudo relajar sus brazos y piernas. Pude ver que las lágrimas seguían pero ahora eran de alivio. 

-"como sabias que la cuerda se rompería ahorita?" - 

-"no lo sabía. Solo estuve preparado" - 

-" como supiste donde encontrarme?" - 

-"no sabia que estarías aquí, no sabía que eras tu. Pero te estuve esperando sin saberlo" - 

-" desde hace cuanto?" - 

-"toda la vida" - 

La baje entonces, para que se apoyara en sus pies, por primera vez en muchos años. Si, le temblaron un poco las piernas, pero ajusto su peso rápidamente, y se irguió. Me volteo a ver con esos ojos verdes, tan hermosos, tan profundos. Y sonrió. Si el sol pudiera sonreir, así se vería. Sentí un calor inmenso dentro de mi. Me emociono tanto verla de pie, relajada y sonriendo. 


Me acerque, la mire directo a esos ojos tan bonitos. La tome de la cintura y la bese. 


La bese.




Enciendes luces en mi qué nadie más puede. Te quiero mucho.

Como la de "check engine".


(Siempre me hace sonreír.)

23.4.20

Alma vendida al peor postor

Otra vez, otro vídeo.
Sin mucha vida y emoción para enfrentarlo, le hablé a Chuy, apenas respirando sintiendo que el mundo temblaba bajo mis pies.

- ¿Chuy? No vengas a la casa. Pensé que serías diferente. Encontré un vídeo.
- (...) Es de hace mucho.
- ¿Por qué ahora?
- Tengo un fetiche, es como ver porno.
- ...
- Ya no te mortifiques. Yo te amo. Ya voy para allá y hablaremos.

Tan campante como siempre, llegó pero se sentía raro, como si sintiera que estaba por perder algo.

¿Cómo creerle? 
¿A dónde ir?
¿A quién recurrir?

El chiste se cuenta solo. Le vendí mi alma, lo poco que quedaba, al diablo, prometiendo que le creería.

Al parecer lo último que me quedaba, la esperanza de que todo podría mejorar para mí, se perdió, se rompió, desapareció.

No tengo a nadie. Si me ves, solo abrázame. Hay piezas de mí regadas por la ciudad, perdidas y rotas. Irreparable.

15.4.20

La familia NO es para siempre

Anoche, llorando y sosteniendo el nudo en la garganta, le prometí a mi madre que me iría. Prefería ver a mi madre tranquila y esa era la manera de devolverle un poco de paz. La indecisión estaba cargada hacía un lado de la balanza, mejor mi hermana en la casa que yo, así ella no se iría de la ciudad y yo estaría aquí pero ¿dónde?

Probablemente la peor idea fue cuando tenía a Chuy en llamada y me preguntó mi madre si ya tenía a donde llegar. 
¿Me das asilo?

Parecía que él quería que regresara, que tendríamos una relación diferente. Aguantándome las ganas de llorar, abracé a mi madre y me subí al carro. Llegué a casa de Chuy pero él no estaba y todavía tardó dos horas en llegar.
No me esperaba.

Sola y rota, le rogué a dios o a mi padre que me ayudara, que me diera una señal. Y tal vez la hubo, los mensajes de Miguel, pero yo no hice caso. Esperé a que llegara Chuy.
No tengo a nadie. Nadie me eligió. 

Pero tampoco lo hizo Chuy. 
Tal vez debí haberle hecho caso a Alex desde el principio. Pero Alex tampoco estaba. Se enojó cuando le comenté lo que iba a hacer al salir de la casa de mi madre. 
Lo siento mucho. Le fallé a todos.

8.4.20

A Chuy, con todo el amor que no vió

Han pasado tres días desde que dejé a Chuy. No sé de dónde saqué valor para recoger mis cosas e irme. Desde entonces lloro mucho, él al parecer no tiene motivación de buscarme.

Mensaje a Carina:
"Yo lo amé mucho. Le di todo a mi alcance, tiempo, disposición, cariño, apoyo moral y económico. 

Sé que no fui la persona más fácil pero no creo haberle hecho mal en su vida. Le perdoné que me haya sido infiel, le perdoné sus equivocaciones y groserías. Traté con todas mis fuerzas de hacerlo feliz, de que sus días fueran alegres, de hacerlo sonreír. Lo abracé todo lo que me permitió. Lo llené de besos todos los días. Cocinaba para él con mucho cariño. Traté de apoyarlo para que fuera el papá presente que dice que quiere ser para sus dos hijos, los cuidé con amor y traté de ser maternal en la medida que su familia y su ex me permitieron. Aguanté humillaciones de su ex y me dolió mucho que nunca me defendió. Aprendí a tratar con su personalidad tan seca y procuraba escucharlo y alentarlo a ser mejor.

Tal vez fui muy sentimental, muy dramática como él decía, muy intensa o muy empalagosa, pero jamás pensando en perjudicarlo. Me habría gustado que hiciera un esfuerzo por verme feliz, por abrazarme un poco más cada día, por darme más besos, por sonreír más. 

Yo pienso que no está feliz con su vida, siempre anda en otro mundo en su cabeza, tendía mucho a mandarme por un tubo o ignorarme. Siempre en el celular, siempre en la computadora. Y cuando se acercaba yo le exigía que fuese más cariñoso. A lo mejor en eso fallé. 

Y muy en el fondo sé que alejarme de él fue lo mejor para mí. Para dejar la oportunidad a alguien que me quiera intensamente, que me lo demuestre, que no tenga hijos para que no sienta que yo soy un impedimento para estar con ellos, que quiera ponerme como su prioridad y que le dé alegría verme sonreír. 

Le deseo mucha salud, alegría y todo lo bueno para que sea un papá amoroso, que sea exitoso en lo que se proponga, que valore más a las personas que lo quieren y que ojalá nunca nunca se vaya a sentir tan mal como me sentí yo. Me duele sentir que fallé, pero no fue así. Y espero que el día que se acuerde de mí le de una punzadita en la panza, que le recuerde que lo quise muchísimo, que me desvivía por él, que habría dado la vida por él, pero fue mayor su orgullo y me perdió."

20.7.19

XIX

"Yo dejé de sentir celos cuando vi que mujeres como yo, hay muy pocas. Cuando me di cuenta de lo mucho que vale mi presencia, cuando vi que ninguna es competencia. Pero lo más importante, cuando comprendí que cada quien está donde quiere estar."

17.7.19

XVIII

Yo creo que estoy loca.
No loca como los jóvenes dicen: "loca porque hago cosas fuera de serie... loca porque me río fuerte... loca porque pienso diferente... loca para ser única y original... loca porque no tomo consciencia de mí misma y espero que alguien se ocupe de mí..."
No ese tipo de loca. Eso no es locura. Eso es querer llamar la atención.

Yo creo que estoy loca, por creer que Chuy cambió de repente y hasta mi estado de ánimo se siente liviano y tranquilo. Loca por tener fe y esperanza a que las cosas, sean o no para mí, dejarán algo bueno antes de marcharse o antes de que se queden para siempre.

La definición de locura, según google, es .- Acción imprudente, insensata o poco razonable que realiza una persona de forma irreflexiva o temeraria.-

Probablemente sí estoy loca.

Hoy le pongo fin a mi desesperación y a mi moral tan aferrada.

16.7.19

XVII

Peso 44 kg, estoy casi en los huesos. La comida me da asco y no siento ganas de vivir. Ya no puedo vivir. Ya no quiero vivir así. No merezco esta agonía, pero no tengo fuerzas de moverme. Necesito ayuda. 

12.7.19

El Error

Domingo 07 Julio (11:58 PM)
Está a punto de acabarse el día. Hoy es cumpleaños de Chuy. Acaba de romper conmigo.

Martes 09 Julio (01:35 AM)
No le hablé en todo el día de lunes. Me sentía fatal. Ni siquiera pude sacar mis cosas. No tenía fuerzas. Y cuando llegó, él no quería verme.

Miércoles 10 Julio (09:15 PM)
.- Chuy, me acabo de dar cuenta que tú hace mucho tiempo dejaste de amarme. Tal vez incluso antes de que te cogieras a Nicole. Y lo más difícil de aceptar es que yo no me había dado cuenta y me aferraba a ti porque creía que lo podíamos solucionar.

.- No es que no te quiera, es que me privaste de ser "yo" y se me quitaron las ganas de hablar y hacer cosas contigo. 

Jueves 11 Julio (11:30 PM)
.- No puedo con esto Chuy. Odio tus "no sé". Nunca sabes nada. Terminaste conmigo, dijiste que habláramos, luego no sabías que hacer, que lo dejáramos "a ver que pasa", y terminas con un "vamos a seguir pero no nos veamos en todo el día"
Ya no puedo. Necesito que sea blanco o negro: es un sí o un no. O terminamos o le echamos ganas los dos.
Si es un 'No' es muy fácil: Mañana me voy, consíguete otra vocalista, ya hablaré mañana con Cristian, Jacobo y Jaime. No cuentes conmigo de ahora en adelante. Me depositarás $$ cada mes hasta que liquides tu deuda conmigo. Tendrás que hablar con mi madre y ponerse de acuerdo como pagarás la deuda con ella. No nos tendremos que ver. Y yo me mudaré. No puedo vivir en una ciudad donde tú estás bien y yo apenas puedo respirar.
Si es un 'Sí' le vamos a poner ganas los dos: vas a ser bueno conmigo. Ya basta de humillaciones y groserías. Y me vas a demostrar amor, el poco amor que dices sentir. Y yo te voy a escuchar y trataré de entender quién eres realmente.

.- Está bien. Sigamos.

(...)

.- ¿Sabes qué? Mejor sí terminemos.

.- ¿Por qué Chuy?

.- Porque estas forzando las cosas. Estoy fastidiado de ti, que no me dejes ser, que ya no puedo hablar contigo. Porque lo arruinaste.

Viernes 12 Julio (12:05 AM)
[Recapitulación del problema el 07 Julio]
No puedo creerlo. Después de darle vueltas al asunto, me di cuenta donde estaba el error: soy yo, porque soy bien desesperada.

Me molesté porque leí entre líneas y, aunque no acusé, insinué que Annie no ponía distancia. Y yo no pude entender porqué se había ofendido.
A Chuy nunca lo dejo terminar de hablar.
Cuando me desespero, me da ansiedad y tengo que hacer algo para ocupar la cabeza. Inmediatamente.

.- Me acabo de dar cuenta que el problema soy yo.

.- ¿Por qué?

.- Por desesperada. Por eso todo desde hace 6 años me sale mal. 

.- Tienes que aprender que todo necesita tiempo. Darle tiempo al tiempo. ¿Qué es lo que te preocupa?

.- Que todo siga igual. Que terminemos odiándonos.

.- ¿Te das cuenta que eso mismo hace que avancemos un paso y retrocedamos 3? 

.- Puedo hacerlo diferente. Pruébame una semana. ¿Quieres intentarlo?

.- Pues sí. Yo no quiero que terminemos.

27.1.19

Primer viaje 2019 - Bendición de cascos

Viajamos cuatro motos: Daniel, Michel, el señor Jesús, y Chuy y yo. Fue largo el viaje. Samantha viajó en auto. Nos hospedamos con Grecia, la prima de Andrea. Todo fue lindo. Fuimos al concierto de Inspector. Hacía mucho frío. Dormí abrazada a Chuy. La bendición. 
Me encontré a Eduardo. Ojalá yo fuera más como Eduardo. Regresamos.

Esa noche mientras dormía, mi papá se sentó a mi lado. "¿Ves aquella luz? Yo siempre seré esa estrella que te acompañe, mas ahora que sientes que todo se está muriendo".
Casi despierto llorando.

22.1.19

XVI

A pesar de lo que había dicho, no lo puedo superar. El miedo me invade de repente y las imágenes de aquel vídeo se proyectan en mis ojos, siento como se revuelve el estómago, tiemblo sin frío, la ansiedad se apodera de mí, empiezo a fumar hasta que siento que por fin vuelvo a respirar. 
Estoy fumando mucho.
Me pregunto si esto forma parte de lo que debo aprender para sobrevivir.
¿Quién en su sano juicio supera una infidelidad, una falla a la confianza, una falta de respeto masiva, una apuñalada seguida de una pisoteada? 

"No hay peor ciego que el que no quiere ver"

10.1.19

XV

Tengo tanto miedo. Creo que me voy a morir.

6.1.19

El regreso de Chuy

Ayer me dolió el pecho, me dio taquicardia, solo pensaba en Chuy. Quería pegarle, reclamarle, gritarle, verlo llorar. Quería que se arrepintiera. No comí en 50 horas, apenas dormí 2 horas en 2 días. Cuando llegaron quise ir por ellos. Algo como taquicardia me volvió a dar, y es que al ver a Chuy todo el dolor físico que sentía se calmó mientras mi alma agonizaba. Eran mas mis ganas de creer que se había arrepentido, que nunca me dijo porque quería olvidarlo, que solo quería estar conmigo. Besarlo revivió las mariposas que se habían muerto dos días antes.

Sé que estoy mal, que no debería de acercarme, debería alejarme de él para siempre, pero no puedo. Lo amo y quiero creer en él. Lo odio. No sé que siento por él. Algo dentro de mí se rompió y se sigue muriendo. Tengo miedo de que Chuy no cumpla con su palabra y termine muriendo de verdad. No puedo con tanto dolor.

4.1.19

La traición

Chuy me puso el cuerno.

Se fue a la capital a surtir mercancía para nuestro local. Todo parecía estar bien. Yo ya lo extrañaba.
Pero dejó su cuenta abierta en la computadora y llegó una notificación de una foto suya. Me dió curiosidad saber si tenía más de él (verlo siempre me llenaba el estómago de mariposas). Había fotos de motos, de su bebé, nosotros... y un vídeo. Darle play fue lo peor que pude haber hecho.
La persona que aparecía no era yo. El otro era claro que se trataba de Chuy, su reloj, su mano, su cuerpo. Pero mas perturbador y chocante fue el edredón que mi madre nos había prestado y mis converse a un lado. Creí que me iba a morir.
Le llamé a Chuy y escucharlo aceptar el hecho me rompió más. Como si aún quedara cosas por romper.

El vídeo lo había grabado Chuy, estando bien nosotros, viviendo juntos, meses atrás. ¿Dónde estaba yo? ¿Por qué a mí? Si yo le daba todo. Todo. ¿Qué estaba mal en mí? ¿Qué hice tan malo para que el karma, destino, dios, lo que sea me tratara así? Perder a mi padre no era suficiente, aún faltaba mas dolor por vivir y pronto, antes de que me acostumbrara a la "felicidad" que sentía de vivir con Chuy.

Chuy era mi todo.

5.12.18

Pasa en la vida, pasa en las películas, pasa en TNT

- Hola, ¿qué andas buscando?
- No, nada. Sólo observaba.
- ¿Te puedo ofrecer algo en particular?

Era una chava delgada, chaparrita, de cabello chino. Parecía que iba a llorar.

- ¿Qué tienes? ¿Estás bien?
- No es prudente que lo hable contigo.
- Pues yo no te conozco y no es como que lo vaya a difundir en la plaza.
- Chuy me dijo que no hablara contigo.

Me puse en estado de alerta. Esto no era normal.

- ¿Ustedes tuvieron algo?
- Por así decirlo, si.
- Pues lo pasado, ya es pasado.

Se me ocurrió que tal vez era una novia o algo de una noche, años atrás.

- Es que yo trabajaba aquí. De hecho, tú exijiste que me corriera.

Entonces recordé que mientras estuve visitando a mi hermana Chuy había contratado a una chava para que le ayudara. Trabajó solamente dos días, y no había pedido que la corrieran, pero a mi regreso ya no era necesaria y no estábamos para tener empleados.

- Entonces, ¿qué fue lo que pasó?

Yo ya estaba completamente seria. Mis manos empezaron a temblar.

- No soy quien para decírtelo, no quiero problemas.
- ¿Qué pasó?
- Chuy no debe de verme. No quería que hablara contigo o que te conociera.
- Dime qué pasó.
- Juro que yo no sabía. Chuy me dijo que era soltero.
- ¡¿Qué pasó?!

Empecé a sentir que la sangre se iba a mis pies lentamente y me invadía el frío. El temblor de mis manos se pasó a todo mi cuerpo.

- Pues, si ves mis brazos te podrás imaginar... - Se arremangó y pude ver los curitas redondos que te ponen después de hacerte análisis de sangre. - ... Chuy sabía que si daba positivo vendría a reclamarle y tú te tendrías que enterar.

Sacó un sobre, con el membrete de Cruz Roja. Cruzaron imágenes en mi cabeza de Chuy y ella juntos. Creo que dejé de respirar.

- Afortunadamente dió negativo... En fin, yo no quería ocasionar un problema, porque sé que esto se lo vas a reclamar en la cara. 
- ...
- Debo irme antes de que llegue Chuy.

Me quedé viendo a la nada durante un minuto que me pareció una eternidad. Tenía que salir. Me sentía traicionada, engañada, sola. Caminé buscando consuelo, que alguien me dijera que todo era una mentira.
Regresé sobre mis pasos, ella estaba recargada en el local de al lado y Chuy en el nuestro, sin inmutarse, como si nada hubiese ocurrido.

Me senté a su lado. Quería golpearlo, pero quería una explicación. ¿Por qué? Acabábamos de estar con mi familia, habíamos pasado una semana increíble. Empezaba a sentir que Chuy se entregaba sin miedo a mí, a mi corazón.

- ¿Por qué te acostaste con ella?

Chuy se quedó pasmado.

- ¿De qué hablas?
- ¡De ella, la que está aquí al lado! - Traté de no gritar. - Por eso me avisaste hasta el último día... ¿Por qué lo hiciste? 

De mis ojos brotaron lágrimas que no quería salir. Pero Chuy tomó mi cara en sus manos y me aseguró que jamás se metería con alguien. Yo era todo lo que él quería.
Yo aún no dejaba de temblar.

Mientras yo le preguntaba a Chuy, la chava ya le había dicho a Daniel que se había metido con Chuy y ahora estaba nerviosa porque aún no tenía el resultado de la prueba.

"Yo pensé que esto solo ocurría en las películas". Sam, Daniel y Chuy pensaron lo mismo, incluso yo lo pensé.

2.10.18

¿Por qué es tan difícil?

¿Qué es tan difícil de entender?

Quien quiera que sea, hombre o mujer, desea que lo amen, y si ya está enamorado, va a querer que esa persona lo ame. Es como matemáticas básica.
Pero si esa persona tiene otras prioridades, dígase de ex-parejas, hijos, perros, trabajos, etc. ¿qué es lo que puede esperar la que le está entregando el mundo entero?

¿Qué puedo esperar cuando nadie te pone en primer lugar? Necesitas estar sola. Lo más difícil es creer que encontraste al hombre perfecto y no tiene defectos, hasta que te pone en segundo lugar. Porque nadie será tan importante como un hijo. Y en últimos años, cada vez que me enamoro de verdad me entero que ya tienen hijos.

¿Qué es tan difícil evitar dejar embarazada a la primer persona que encuentran en el camino? Y me encanta porque siempre dicen que "no se amaban pero sucedió". A veces quisiera explicarles cómo se forman los bebés, por si no lo sabían.

1.10.18

Los hijos antes de las segundas nupcias

Que difícil. Se me hace un nudo en la garganta al llegar y escuchar la risa de la bebé.
Ella es bien linda, bien hermosa. Y me reciben cómo si no ocurriese nada, pero yo ya no podía actuar normal.

- ¿Por qué no me avisaste?
- Ya sabías.
- Me hubieras dicho para quedarme en casa con mi hermana y mi mamá. 
- Como quieras.
- ¿Necesitas que se lave algo más de lo que ya está en el bote?
- Saca mi ropa, yo puedo lavar solo.

Trago saliva. Se me cierra la garganta, se aprieta el estómago, duele el corazón.

- Y deberías de irte pronto, para que no se haga tarde.

Salió a dar la vuelta con la bebé. Cuando regresó yo ya no estaba, pero tampoco le importó si yo siguiera ahí.

20.9.18

Anillo de promesa

Hoy cumplimos nuestro primer mes de novios formales, y supuse que estaría planeando algo porque actuaba un poco raro.
De repente, ya estando en la plaza, me abraza por detrás con todo el amor que Chuy puede expresar, ese que me derrite, y me susurra al oído. Feliz primer mes mi amor. Pone frente a mí una cajita y mis piernas tiemblan. Ábrelo. Y lo primero que veo es un anillo. Sentí miedo, alegría. Sin pensarlo ya le estaba diciendo que sí pero él sólo se sonrió. Quería llorar y deshacerme en el aire. Abre la notita.

"Prometo cambiar este anillo de promesa por uno de compromiso. TE AMO"

Una vida con Chuy. Cada vez que me enamoraba, pensaba que había conocido a la persona perfecta para mí, me decepcionaba y creía que yo no podría encontrar a alguien que me amara por mi persona. Y luego llegó Chuy. Y cada día me enamoro más de él. Una vida de amor con Chuy. No puedo esperar.

19.9.18

El respirar de Jesús

De las cosas más raras que uno puede escuchar en esta vida es oír la respiración de Chuy al dormir. Ronca como si tuviera altavoz, pero lo más preocupante es cuando deja de respirar o cuando se detiene a mitad de la inhalación y su cuerpo se contrae buscando almacenar el oxígeno que no tiene cómo llegar dejando un espacio sin respirar, sin moverse, un pequeño vacío en su existir... Y de repente vuelve de golpe, como un bebé que llega a la vida, caótico, y Chuy exhala.

18.9.18

Cicatrices

Hay personas que no sonríen con los labios, sino con toda la piel. Las caricias de los músicos son ásperas porque las horas de práctica se acumulan en sus dedos. La piel suave es agradable al tacto pero la piel rugosa es evidencia de cuánto amamos lo que hacemos.

Las marcas en tu piel son las huellas visibles de tu recorrido por la vida. Cada lunar, tatuaje y cicatriz son vestigios de tu pasado, de tus decisiones, tu personalidad y tu manera de enfrentar los desafíos; te has convertido en la persona que decidiste ser y tu piel es el lienzo donde se ha registrado ese maravilloso proceso.

17.9.18

Te soñé papá

Estábamos en la casa, tal vez era un cumpleaños. Y mi madre no estaba en la sala, por lo que salí a buscarla a los cuartos. Y de la recámara principal apareció mi papá. Me preguntó por mi madre y le dije que yo pensaba que ella no quería estar ahí. Él solo se sonrió discretamente y dijo: "Aquí estamos todos juntos". Entonces me di cuenta: mi papá no estaba realmente. Un impulso interno me quiso lanzar a abrazarlo, y como si fuera una película, una fuerza me alejó lentamente de él y de todo lo que me rodeaba. Yo ya estaba llorando.

Me desperté llorando. Abrazando la almohada y tratando de respirar sin poder contener el dolor que se crecía en mi interior sin poder salir, aplastando mis pulmones y estómago, desgarrando mi garganta y cortando mis ganas de vivir.

No habrá nadie que cure la herida que el cielo, dios, el destino o lo que sea hizo al dejarme en esta vida sin la presencia de mi papá.

12.9.18

11 de septiembre

Jamás existirá un día tan triste como anoche. Estaba cenando con los hermanos de Chuy, mientras reíamos sobre la vida amorosa de Sam. Sabes que desde que le llaman a tu novio para pedirle que te lleve a la casa de tus padres en tu carro todo está mal. Hablé para confirmar. Mi papá se sentía mal, lo querían internar, se había desmayado, estaba dejando de respirar. Me colgaron.

Yo manejé. Al llegar estaban mis tíos los doctores y sus familias. No saludé a nadie. Fui directa a ver a mi papá y él estaba recargado en el sillón. Mi instinto fue levantar su muñeca para tomar el pulso, pero no hizo falta, su mano estaba fresca, lo más raro en él. Su piel estaba tomando un color amarillo, como la mía, y en su cara se notaba el sueño tranquilo que lo caracterizaba, pero sin los ronquidos. Mi mamá lloraba. No pude hacer nada. Era una situación aparentemente normal, pero su pecho no se elevaba como normalmente lo hacía. Me recargué en él, esperando que su brazo me rodeara como siempre, con fuerza y peso pero no lo suficientemente largo antes de tratar de alejarte inconsciente de su acción, pero no lo hizo. Me metí a la fuerza debajo de su brazo pesado y no me apretó, le susurré que me abrazara, que se levantara o de perdido me hablara, pero mi papá siguió inmóvil. Y yo ya no podía respirar.

Todo transcurría a la distancia, los trámites, las llamadas, mis tíos moviéndose. Yo solo quería escuchar hablar a mi papá, pero él seguía dormido. Marce se rompía en otra ciudad, imposibilitada de llegar en minutos, de estar, de verlo, de despedirse...

Ya no escucharé su risa sarcástica, ya no habrá quien se burle o me regañe, o se preocupe o me abrace. Mi mejor amigo se había ido y me dejó aqui sin instrucciones para vivir sin él. Y en mi desesperación escuché a alguien decirme "No llores, debes ser fuerte para tu mamá y tu hermana". No puedo.

No puedo vivir. No sé qué hacer. Siento que una mitad de mí se desvaneció entre mis dedos, inalcanzable. No sé qué se hace ahora. Me perdí.

30.8.18

XIV

Sólo por si me lees.
Soñé contigo, te necesito y quiero verte.

Lo que me gustaría decirte cuando me acuerdo de las cosas bellas que vivimos. Luego recuerdo que les mandabas mensajes lascivos a otras y les contabas nuestras intimidades a tus amigos y me dan ganas de agarrarte a cachetadas hasta que se me caiga la mano.

16.8.18

Deja vú

Deja vú es verte recargado en mi hombro de esa manera, es preguntarte si seríamos amigos de no ser lo que hemos vivído y recordar (o imaginar) que estábamos sentados en una barda una noche, tú a mi izquierda, tu cabello más corto y el mío más largo y oscuro, y preguntarte lo mismo. O la caja donde guardé el cambio de un billete de una clienta.

12.8.18

(Def. en desarrollo)

Dicen que en la vida solo te enamoras 3 veces en la vida: El 1° que llega en la adolescencia, te enseña a querer con ilusiones, casi como si estuvieras en una película. El 2° te enseña el dolor y te aferras a pesar de que sabes que no es para ti, que hubieras deseado que fuera para siempre, pero a la vez te ayuda a madurar. Y el 3°... el que no esperabas, que sin tener expectativas te sorprende, es el que cura las heridas y te hace feliz, el que llaman el verdadero amor...

Fue rápido e inesperado, ya nos conocíamos desde dos años antes, habíamos trabajado varias veces... Me caía mal, creo que incluso llegué a detestarlo. Y luego hace un año y en contra de mi voluntad, empezó a trabajar en la academia. No nos dirigíamos ni la mirada, pero la cuestión laboral me hizo hablarle. Poco tiempo después hacíamos pequeñas bromas, lo veía con gusto, empezamos a platicar de todo y nada, me contaba de sus aventuras nocturnas, me empecé a preocupar por él (y por ellos), se volvió mi mejor amigo al que yo quería platicarle todo, imaginaba o divagaba y siempre quería platicarle primero a él. Un día entró en crisis y lo único que pude hacer fue abrazarlo fuerte y decirle que todo estaría bien. Nunca nos habíamos abrazado tanto tiempo, tan íntimo. Algo empezó a cambiar...Y luego se enojó por la actitud de Leo y me dejó de hablar. Ese día sentí tantas ganas de llorar, de reclamarle si yo no había actuado mal, y su mensaje a media noche me reconfortó un poco: "A, en serio perdón, de verdad perdón, me sentí muy mal haciendo eso. Te quiero mucho y valoro muchísimo tu amistad. Te lo juro no lo volveré a hacer. Aun me siento mal por eso."
Llegó el día que Leo y yo terminamos, y parecía que todo se empezaba a fracturar por todos lados, pero él no me dejó sola, sin pedírselo, sin querer algo... Había un respeto impulsado por un cariño implícito.

Pasados algunos días comenzaron lo accidentes, besos de despedida cercanos a las comisuras de los labios, justo en el momento de despedirnos mi corazón latía con fuerza y rapidez, dejaba de respirar esos segundos y lo sentía cerca. Anhelaba toda la noche a que llegara la despedida. Empecé a ver diferente a Chuy.

Algo tiene que lo hace tan especial, tan mágico e increíble: su forma de ser, su risa, la forma en que sonríe, las cosas que me platica... Nos tomamos de la mano y su piel era diferente, se sentía como si reconociera su caricia. Mientras caminábamos me abrazó como quien abraza a un ser querido juguetón, dulce, sus brazos me rodearon desde atrás como si el doblez de mis brazos estuvieran destinados a embonar ese abrazo, sonreí tanto que hasta yo me sorprendí.

Una noche me abrazó después de haberle contado un problema, él sólo me veía y sonreía al ver mi ridícula desesperación, y justo cuando nos separábamos volteé a verlo, sus ojos estaban directo a los míos, nuestras narices se rozaban, sus labios a escasos milímetros, y me detuve. ¿Era justo el momento, ese que ya soñaba? Un segundo, o dos, o tres... Chuy acercó sus labios a los míos delicadamente y los posó finamente haciendo caricias sutiles con ellos y yo dejándome llevar por el sabor, la textura, su aliento. Sus manos acariciaron mis brazos y se dirigieron a mi espalda, envolviéndome nuevamente, mis manos tocaron sus mejillas suaves, recorrieron su mandíbula y se frenaron en su nuca atrayéndolo hacía mí.

9.8.18

Soñé que volaba

Soñé que volaba, unas alas blancas salían de mi espalda. Podía sentir como se movía los huesos dentro de cada una, el aire que emitían movía mis cabellos que acariciaban sutilmente mi rostro, el esfuerzo en el abdomen, la patada en el suelo y la sensación de altura en el estómago.
Aun siento la necesidad de elevarme, de golpear el suelo y elevarme. 

6.8.18

Post - Leo

Se siete como la asfixia: se atrofia el abdomen, no puedes respirar, la garganta se cierra, quema hasta el cuello, arde el estómago, los ojos se humedecen y crees que se saldrán de sus cuencas, las manos te tiemblan y sudan, te aferras de cualquier cosa, te arrancas la piel.
Tu corazón late a mil por hora, hiperventilas, te mareas, el zumbido llega, lucecitas aparecen en tu visión, se inundan los ojos, te quema la piel.
Los recuerdos te envuelven, ya no sabes diferenciar entre los anhelos y las vivencias, entre lo que pensabas y la realidad. Sientes miedo, no encuentras tu lugar de paz, se apaga la luz. Te conflictuas, te pierdes, te ahogas. Ya no puedes respirar.
Se siente como la asfixia. Ansiedad, desolación. Como asfixia. Te dices que estás bien. Asfixia. Tomas agua, fumas. Asfixia. Te arrancas la piel. Si dejara de respirar, todo estaría bien.

26.7.18

Carta a Leo en su cumpleaños

A ti, que te amé tanto y que no funcionó porque ya no podíamos seguir, a ti siempre por siempre te voy a desear un feliz cumpleaños, una buena estancia en este plano terrenal, mucha muchísima salud y lo mejor que tenga la vida para ofrecerte.
Sé lo que piensas aunque me mientas en la cara, aunque hables mal a mis espaldas, aunque hagas que todos te crean a ti, que digas que yo te fallé o te mentí. Esta bien.
Siempre fuiste una excelente persona conmigo, a pesar de las crisis, los problemas, tus celos, tu posesividad, tu forma de hablarme al final, o tu border line, a pesar de todo eso siempre supiste mantener mi corazón orgulloso de ti y de lo que hacías, aun si yo no podía ver que algunas cosas estaban mal.
De todo corazón espero que haya alegrías en el futuro. Deseo que tus niños salgan adelante, se vuelvan independientes, respetuosos, talentosos, que no tengan miedo de la vida, que encuentren a alguien que les de ese amor maternal que les hace falta, que Tadeo no me extrañe como yo lo extraño, que sean felices y no les falte nada nunca. Deseo que las malas rachas económicas se vayan, que fluyas ahora que no estaré para detenerte o para tratar de resolverte la vida. Que estos malos ratos se vayan y no vuelvan jamás. Deseo que vuelvas a sonreír.
No sé si alguna sonrisa tuya fue real, fue genuina que yo te haya creado. Supongo que algún día deberé de entender que todo de lo que me privaste tú lo hacías y eso te hacía sentir mejor, esos mensajes y conversaciones con otras personas.
Aun y cuando sentía parcialmente el rechazo de tu familia, guardaré para mí los buenos momentos contigo y con ellos, gracias por incluirme y dejarme participar en los eventos importantes.
Quiero que sepas que siempre fui sincera, jamás te mentí o te fallé, incluso por encima de mis ganas o mi salud siempre te cumplí. Y hasta el último momento deseé mi vida a tu lado, quería vernos envejecer juntos, tantas aventuras que contaríamos, tantos sueños que íbamos a cumplir...
De verdad espero que no estar juntos nos haga mas fuertes, mas grandes, mas productivos, mas sensibles, mas valientes para amar.
A ti, JNLHM, con todo lo que soy te deseo un feliz cumpleaños. EPyAO, QH:.



Este fue el mensaje original. Por obvias razones no podía escribirlo en su literalidad, y ya tuve suficiente con las burlas de tus "amigas". 

18.6.18

CC

No he podido esta vez,
vuelvo a no ser,
vuelvo a caer.
¿Qué importa nada si yo,
no sé reír,
no sé sentir...?
Quiero oírte llorar y que me parta el corazón,
quiero darte un beso sin pensar,
quiero sentir miedo cuando me digas adiós,yo quiero que me enseñes a jugar.

Sé que me he vuelto a perder, 
que he vuelto a desenterrar todo aquello que pasé.
No sé ni cómo explicar que sólo puedo llorar,
que necesito la paz que se esconde en tus ojos,
que se anuncia en tu boca, que te da la razón.
Ven cuéntame aquella historia de princesas y amores que un día te conté yo.

Hoy he dejado de hablar,
quiero callar,
disimular.
Sólo me queda esperar,
verte pasar,
reinventar.
Quiero sentir algo y no sé por donde empezar,
quiero que mi mundo deje de girar,
quiero que mis manos tengan fuerza para dar,
quiero asustarme si no estás.

Sé que me he vuelto a perder,
que he vuelto a desenterrar
todo aquello que pasé.
No sé ni cómo explicar que sólo puedo llorar,
que necesito la paz que se esconde en tus ojos,
que se anuncia en tu boca, que te da la razón.
Ven cuéntame aquella historia de princesas y amores
que un día te conté yo.

11.5.18

RP

A veces sueño contigo, otras veces me acuerdo de ti y de cómo tuvimos una amistad muy agradable. Yo también quisiera volver a hablarte porque lo siento igual que tú: no hay ninguna persona con la que yo podía hablar de todo como lo hacía contigo. Todo estaba bien cuando hablábamos. Fuiste mi mejor amigo por muchísimos años y eso es lo que más extraño. Quisiera hablarte y preguntarte tantas cosas, pedirte un consejo o un abrazo. Han pasado más de 5 años que parecen toda una vida. Y lo peor es que, a pesar de mis ganas de hablarte, no puedo por una promesa que hice. Y pone en balance lo que me gusta hacer, mi presente, contra tenerte en mi vida. Y muy en el fondo creo que nunca más volveremos a hablar. Hacen falta las palabras para expresarte cuánto te extraño y cuánto me haces falta, pero es más fuerte mi voluntad. Ojalá puedas entender. Tal vez lo único que necesitamos es decirnos de frente adiós. O tal vez estoy tomando la decisión incorrecta al seguir apartada de ti. 
Con todo mi cariño espero que estés bien.

9.4.18

Cortazar

"Si me ves por alguno de tus pensamientos, abrázame que te extraño."

- J. Cortazar.

1.4.18

Mi sueño destrozado

En algún momento tuve un sueño muy bello, me hizo muy feliz. Estaba sentada en un piano blanco de media cola en un salón muy amplio y Freddie Mercury se sentó a mi lado, me dijo que me enseñaron a componer como él y empezó a tocar el piano. Fue realmente precioso, no quería despertar.

Y tuve la mala fortuna de platicártelo.

Hace unos momentos te burlaste de mi sueño, de como yo "hablaba" con Freddie Mercury y como debía de saberme todo de Queen.

Destrozaste lo que se supone debía ser un bello recuerdo. Tal vez ya no logre percibir la belleza otra vez. Y eso me duele en el alma.

5.2.18

XIII

Siento que me estoy ahogando. Quiero hacer las paces con la vida.

27.1.18

Des-acoplo

Debe ser raro que por primera vez no te puedo seguir la corriente. Tal vez sea difícil de entender que no puedo acoplarme. Tal vez sea momento de hacerlo bilateral, si puedes, y si no, enfrentar lo que sabemos pero no quieres aceptar porque sería des-acoplarme de ti.

21.12.17

¿Milagro?

A pesar de que los planes van cambiando, seguimos juntos porque nos amamos. Porque yo no concibo la vida sin él. Es tan... todo para mí, lo que realmente soñé en esta vida.

Pero ya son dos en una semana, en el mismo lugar de impacto, diferentes locaciones y con un riesgo total de muerte para los dos.

Hoy, hace justamente una semana, regresábamos del trabajo (como siempre), la lluvia empapaba el cristal y el frío lo empañaba por dentro por lo que viajábamos con los vidrios bajos recibiendo el aire helado en nuestras caras. Poca velocidad para evitar un accidente. De pronto, unas luces aparecieron a nuestra derecha y ví correr el tiempo más lento, sabía que no pararían así que aceleré todo lo que pudo el motor y por un segundo creí que lo lograríamos pero al segundo siguiente la llanta trasera derecha se levantó por el impacto, el carro viró casi quedando en sentido contrario y Leo se bajó inmediatamente. Quería preguntarle si estaría bien pero pensaba en nuestros planes y debía revisar el auto. Los otros arrancaron y se dieron a la fuga, cruzando en rojo el resto de los semáforos de la calzada. Leo y yo, debajo de la lluvia, nos vimos y con solo un movimiento de cabeza sabíamos que los dos estábamos bien. Unos meseros del salón de eventos que estaba en contraesquina de dónde ocurrió el accidente corrieron a nuestro encuentro, preguntando si estábamos bien, si requeríamos de ambulancia... Pero Leo y yo estábamos bien, y el carro también. Había sido un milagro. Sólo un pequeño metal doblado como daño secundario cuando el daño real pudo haber sido la muerte.

Anoche, después de trabajar y a una gran velocidad, nos encontrábamos manejando cerca de nuestra casa y al dar la vuelta en una vía de alta circulación una camioneta no frenó en su rojo y así se estampa contra nosotros. De milagro seguimos vivos.

28.11.17

Acoplando

Él no supo cuando mis ojos se llenaron de lágrimas cuando dijo "ustedes". Se podrían haber confundido con alegría por ser un honor pertenecer a los mas amados por él, pero yo no me sentía feliz. Fue una punzada entre las costillas, una aguja que hiere el alma, matando con toda rapidez aquella magia que habíamos creado para nosotros, sólo nosotros dos. Y es que a pesar de que le expliqué el dolor que me causó él no entendió. Él jamás entenderá lo que es ser una acoplada mas en sus amores.

Yo quería ser la única, la primera, el amor que le arrebatara cada suspiro, cada sonrisa, cada alegría, cada recuerdo. Que formáramos una relación, un sueño, un proyecto, una meta, una aventura, lo que sea, pero juntos, solo él y yo. Que muriera por verme, por escucharme, por tocarme, por besarme, por pegarse a mí y no separarnos jamás. Pero eso nunca llegará. Soy la acoplada a eso que ya tiene, eso en lo que yo no formé parte. Porque no soy la única ni la primera, hay más. No puedo ser un amor entero, sino una tercera parte de su sonrisa y su alegría. Soy apenas el recuerdo que se va formando, algo sin historia. Que no tendremos un sueño, un proyecto, una meta o una aventura porque hay que trabajar sobre lo que ya hay y lo que se necesita, no lo que se desea. Que yo sé que se muere por estar conmigo, por esos besos, esas palabras, esas caricias, pero aun así cuando estiro los brazos al despertar él está sentado en la sala viendo su celular.

Acoplada. Acoplada a su vida, a su proyecto, a su forma. Y yo acepté eso para estar con él. Porque él me hace sentir el universo y más, la belleza del mundo y la melodía de la vida. Y probablemente yo sí muera por verlo, por escucharlo, por tocarlo, por besarlo, por unirme a él y no separarnos jamás. Porque yo no tengo a nadie.

Y él sí. Y para siempre.

20.10.17

La expresión jamás hecha

En el momento en el que lo dije sentí que algo se rompía dentro de mí, como cuando un hueso fracturado sana con calcificaciones a su alrededor e inesperadamente se rompe.

No sé cuánto tiempo lo tuve guardado, tal vez 5 o 15 años, tal vez un poco más. "Era un rey de chocolate con nariz de cacahuate, que a pesar de ser tan dulce tenía amargo el corazón". Sonaba una y otra vez en mi cabeza como un recuerdo que estaba dejándose ver en ese comentario dicho.

Ahora se trataba de un talento insuperable, de la alabanza hecha y destrozada por la falta de fundamentos y hechos, exceso de ego y una amistad con tintes de algo más. Pero para mí era lo mismo de siempre: la búsqueda vana inconsciente de la apreciación de la esencia que marca la pauta de mi existir.

Leo solo me abrazó hasta que nos quedamos dormidos

19.6.17

Leo, mi todo

Como haya sido, aún me tiene loca por él. Tan sólo leer sus mensajes y puedo escuchar su voz como si estuviese a mi lado, puedo sentir su aliento y sus manos que se cuelan por debajo de mi ropa. Somos quienes somos, con defectos y virtudes, ansiosos y desesperados, orgullosos e hirientes, pero si en algo me tiene muy enamorada de él es como al final sus besos funden mis enojos y sus manos calman y emocionan mi piel.

Lo adoro. Aun no puedo creer que ya casi ha pasado año y medio de estar juntos y sigamos enamorados como la primera vez. Leo y yo estábamos destinados a encontrarnos, a vivirnos y disfrutarnos para la eternidad. El habernos conocido hace 9 años y que tan solo unos minutos bastaran para desearnos y anhelar la vida juntos. Cuántas cosas habríamos vivido, cuántas cosas nos habríamos ahorrado de sufrimientos y decepciones, cuántas noches nos perdimos de hacer el amor y enamorarnos cada día más.

Solo le pido al cielo alegría, salud y prosperidad, éxito y fama, para lograr esas metas que hemos planeado cada quien desde su infancia y lograrlas juntos, siempre juntos. Es mi todo, el amor de mi vida, el verdadero amor que nunca creí sentir. Él me hace sentir plena, segura, confiada, valiente y, sobretodo, amada.

3.6.17

¿A dónde se fue?

Supongo que la respuesta a las preguntas se dió al final de nuestra amena charla de esta madrugada. Algo que yo supe desde el primer momento, solo necesitaba que lo dijeras... Y lo hiciste. Ahora no sé cómo comportarme, qué hacer o qué decir.
Dijiste que aquel que realmente ama nunca se va. Pero aseguraste que yo necesitaba una vida sola, sin parejas. No sé cómo deba sentirme. ¿Se supone que eso me daría paz? ¿Qué se supone que se hace en estos casos? ¿El amor, del cual hablamos toda la noche, a dónde se fue?

30.3.17

What if

Yo ví como rodeaste su cuerpo con tus brazos, como pusiste tu cabeza en su hombro, y confirmaste mis sospechas cuando planeaste una salida en la que yo no estaba involucrada.

Eso me dejó triste hasta la noche, aunado de que mejor el bajista titular cree en que yo puedo con todo lo que involucra el escenario en vez de que tú te sintieras orgulloso de mí.

Y al final, yo soy la que no puede sentirse mal, cuando estoy contigo y viviendo lo que tú vives: las expectativas, la desesperación, las ganas bloqueadas, los momentos de angustia, las malas caras y las vibras negativas, tus crisis de salud y las consecuencias de las mismas.

Ya no quiero acompañar vidas ajenas ni vivir en otras casas. Quiero que se involucren conmigo, que compartan el momento, pensando en lo que tú quieres y yo quiero, que crezcamos juntos de todas las maneras: laborales, económicas, motivacionales, personales y en pareja. Soñar juntos y no apegarme a los tuyos.

¿Qué pasaría si quisiera seguir un sueño en el que no puedo esperarte? ¿A quién vas a sacrificar?

25.3.17

Thousand years

La noche brillaba encima de los árboles enormes que me rodeaban, era una noche perfecta. Caminé por el sendero para llegar a una especie de laberinto en forma de caracol sin paredes, repleto de luces amarillas que hacían romántico el lugar. Esa canción, que me hacía pensar en una película y un pasillo de agua rodeado de velas, sonó a mi alrededor y no pude evitar sonreír. Una sorpresa inesperada, agradable y a la vez cliché, de quién te conoce y explota ese lado escondido. Seguí el camino que me marcaban las luces. Estaba acercándome al centro cuando detrás de un árbol salió un muchacho diciendo lo mucho que se había esforzado para lograr sorprenderme. Y lo estaba. Él no debía estar ahí. ¿De dónde había salido? Y ¿Por qué? Entonces comenzó el preparativo, pero yo ya estaba angustiada, quería salir corriendo. Quería encontrar a Leo. ¿Por qué no estaba él? Pero no podía moverme. Tuve que escucharlo, y al terminar había muchas personas a mi alrededor, esperando mi respuesta a la propuesta que había hecho. Solo pude abrazarlo y pedirle que me dejara, que tenía que irme. Era horrible, decirle eso, queriendo agradecerle su atención, su enorme detalle. Él me conocía, pero no debía estar ahí. Yo pensaba en Leo. Solo quería encontrarlo, abrazarlo y besarlo hasta que mi cuerpo se fundiera con él y jamás separarnos.

Afortunadamente, lo que parecía fundirse era mi pierna junto a la de Leo, la que estaba hirviendo. Había sido una noche muy caliente y mi alucine se estaba esfumando. Abracé a Leo y una vez más, como cada noche, le juré que siempre estaré con él, porque yo soy de él y solo de él.

8.3.17

2° grado

Una semana antes, estaba estudiando, aprendiendo y entendiendo tanto en un solo día. Fue como si estuviera a punto de enfrentar la muerte pero yo estaba emocionada. Nada podía frenarme, incluso cuando Alan quiso hacerme sentir miedo. Mi resultado fue aclamado con honores y felicitado por B y mis hermanos.

Hoy fue el día, cuando pasé de grado. Tan preciosa la ceremonia y la sorpresa cuando B bajó de oriente y me obligó a caminar en contra de la energía y con la espada en el corazón. Cada vez más cerca de la plenitud con ser humano y de la música. Porque ello vive en mí, compañera.

17.2.17

Anoche, el bar

Después de estar tensos y haber dejado de pelear, llegamos al bar. Nos habíamos jurado no pelear porque es más nuestro amor que el coraje que podamos sentir, y nos comprometimos a dar lo mejor de nosotros para pasarla bien. Jorge llegó minutos después y se puso a cantar. Al poco tiempo, pedí una canción para escucharla y Gloria, la dueña que tenía rato en una de las mesas, ordenó que si querías una canción debías de cantar primero. Después de varias bebidas y sabiendo que mi profesión es cantar, se me hizo fácil recibiendo tequila de premio. Pero Gloria quería escuchar más, y yo seguí cantando. Unas cuantas canciones, unos cuantos tragos. Me senté junto a Gloria y su amiga, que tenía poco de haber llegado. Ellas querían aprender canto y ofrecí darles clases en la academia. Entonces todo empezó a caminar despacio y en círculos. Les prometí hacerlas cantar música ranchera en un mes y me ofrecieron ser socia del bar y trabajar entre semana. La cabeza me daba vueltas y llegué al baño, donde me recargué en el lavabo y perdía el equilibrio constantemente. Leo fue a sacarme de ahí, estaba cayendo del sueño que me invadió de repente. Mis palabras se arrastraban al salir de mis labios y el mundo giraba muy rápido. Me sostuve de un poste mientras mi novio, Jorge y el guardia de seguridad cruzaban la calle para ayudar a una mujer que estaba siendo golpeada por un hombre. Abrí mis ojos y Leo me había subido a un auto, sosteniéndome la mano y despertándome cada pocos minutos. Abrí los ojos nuevamente. Ya estábamos en la casa, caminé directa al cuarto y cuando me senté en la cama la oscuridad se apoderó de mí. Otra vez.

30.12.16

Aventuras de la llanta

Había sido un día de mucho trabajo, estaba cansada.

El día de ayer habíamos ido a trabajar y siguiendo el consejo de un hombre que cuidaba carros me estacioné en un lugar al que no me di la importancia debida, que si lo hubiera hecho no me habrían quitado las placas. Por si fuera poco, el hombre se enojó cuando se le cuestionó el porqué de su falta de trabajo cuando estaba exigiendo una cuota alta, y nos lanzó pedazos de block al auto. Leo estaba a punto de reventar y yo peor. Salí disparada manejando detrás del sujeto con la finalidad intención de atropellarlo y una patrulla policía me hizo alto. Yo creo que me vio muy enojada el hombre que prefirió hablar con Leo y sugerir una patrulla de prevención. Pff ¡¿prevención para qué?! Manejé lo más tranquila posible hacia la casa y que Leo me abrazara durante la noche.

Hoy en la noche, hablaba con Cynthia por el celular, cuando no entendí lo que decía Leo y le di un golpe a un taxi. Traté de llevar las cosas bien mientras Leo entraba en pánico y me exigía irme del lugar, como vil prófuga de la justicia. Pero el taxi se fue y, siguiendo el consejo de Leo, me fui a pasear por el rumbo, zigzagueando calles, en lo que Leo se calmaba y yo regresaba al lugar en donde pensaba estacionarme.
Más tarde, después de acomodar nuestro equipo en el bar donde íbamos a trabajar, nos fuimos a tomar una cerveza con Cynthia, para platicar con ella y su novio, cuando regalaron shots de tequila. Antes de ir a trabajar, Leo traía una botella de vino, que nos había regalado B en el viaje a la segunda ciudad más importante del país, y la abrimos con fines de celebrar nuestro primer año juntos. Solo que Leo no contaba que a la hora de cantar, yo podía tomar más que él. Cuando la noche acabó, Leo había bebido apenas unos tragos de la botella y yo estaba muy alterada. No sé cómo me bajé del escenario. No estaba bien, lo sabía, pero ya no había mucho que hacer. Caminé vaga hacia la salida con Leo a mis espaldas y nos subimos al auto. Manejé lo más cautelosa, hasta que ví las luces de la policía a mis espaldas y me dí a la fuga, motivada por la valentía de Leo. Una fuga mal hecha tomando en cuenta mi estado de salud. Me sentía estrella de película de acción, y se nos ocurrió que podía darme en reversa, hasta que topé en la banqueta y algo explotó. Una mujer vestida de policía se acercó a mí y me pidió hablar a parte. En mi poco grado de consciencia le confesé que no me sentía bien y que sólo deseaba llegar a casa y le pedí que nos dejara ir. Ella estaba muy tranquila, apenas doscientos pesos bastaron para arreglar mi daño a la ciudad, solo pidiéndome de favor calmar a mi acompañante: Leo y el otro policía peleaban bastante agresivo verbalmente. Como pudimos llegamos a la casa, para bajarme y morir mentalmente en la cama, arrastrándome la oscuridad y llenándome de un vacío que juraría parecía el limbo o la muerte.

No sé ni cómo desperté. Solo que debía ver el carro, y darme cuenta de que la llanta había explotado. Muy temprano y preocupada por el trabajo de hoy en la noche, Leo, el vecino y yo cambiamos la llanta, justo el momento para arreglarnos e irnos a trabajar. Solo que ahora con más precaución.

27.11.16

Sopa cruda

Todo comenzó a los 4 años con esa manía de comer sopa cruda. Jamás me había pasado y sin embargo, ahí estaba yo abrazando el excusado y observando como la sopa cruda se despegaba de mi estómago... Punzadas y dolor por todo el cuerpo pero sé que lo tengo bien merecido, tal vez era lo que necesitaba para empezar a sanar.

5.11.16

Turbio amanecer

Pensaba que se trataba de una maldición por la hora, era muy tarde, demasiado. No debíamos estar ahí, nada de lo que ocurrió debió suceder. Se tocaron temas muy delicados, con volúmenes no necesarios, lágrimas que descendían sin control, solo el agotamiento que nos llevó a culminar justo cuando comenzaba el amanecer.

21.10.16

Llegaste tú

Amo despertar a su lado. Su brazos a mi alrededor, la forma en que delicadamente me pega a él y siento su amor en la piel, respirar junto a él y dedicarle la primer sonrisa del día. Es una burbuja donde no existe nada mas que nosotros y la alegría de vivir un día mas juntos. La electricidad que inunda, como un huracán que mueve, cambia, acelera, calma, estremece y, de repente, la paz. Él llegó a mí y el mundo dejó de girar.

11.10.16

Por siempre, Lua

Siempre he de extrañar esa forma de llegar y recargarte en mi pierna, mirarme a los ojos y hacerme sentir como que me estuviste esperando todo el día. 

Llegué a la casa y nadie salió a recibirme, nadie se asomó por la ventana, nadie avisó que ya había llegado. No es lo mismo. La casa está mas callada, nadie se asombra por los cambios de imagen que hace mi madre, ni se detiene a observar los alfileres que cayeron al suelo. Incluso hay menos pelo que barrer. Ya no tengo que preocuparme por las medias usadas, sé que ya no habrá quien se las lleve. No hay quien me acompañe a cenar y cuando tenga mucho sueño, no hay quien me lleve a mi cuarto y se despida de mí con sus ojitos cansados y su nariz que se estaba despintando por tomar agua con jabón. 

Extraño tu compañía. No olvidaré tu carita cuando salí a verte y estabas muy cansada, rara vez me llego a asustar de esa forma. Siempre te amaré por demostrarme tanta alegría y amor. Fuiste una luchadora. Un día nos habremos de encontrar, mi consentida, Luita bebé, mi Lua. 

2.10.16

El malentendido, su mirada y el día perfecto

Todo comenzó con una noche casual, risas y pláticas. Mis padres disfrutan tanto de su compañía y sus temas de conversación, yo no puedo pedir más a la vida, es como estar viviendo un sueño a su lado. Me encanta, me tiene completamente enamorada. Tanto he vivido pero con él estoy conociendo la felicidad plena. Nada se compara a lo que tenemos. Nada. En el pasado, llegué a pensar que en el amor también debía de existir el sufrimiento, pero con Leo todo es belleza, es amor, besos, abrazos, risas, música, energía y ciencia.

Debo aprender a que me puedo dar a malentender si no se explican bien las cosas, porque puedo herir y lastimar con una sola palabra. Estaba herido, lo sé, todo lo que se dijo después fueron lágrimas de un corazón dolente que sabe amar y dejar las heridas a un lado porque el amor es más fuerte. 

La noche siguiente es de trabajo pero en sus ojos la vida brilla. Lo veo y no lo creo, me encanta, lo amo, lo adoro, es perfecto para mí. Nada ni nadie se puede comparar con él, es superior a todo lo que existe, es luz y música fundidos en un ser hermoso. El hombre lloraba y lo abrazaba, la pérdida de un hijo no tiene palabras para decirse, y al terminar nos fuimos a seguir tocando aunque no fuera trabajo, es dejarlo reencontrarse con amistades viejas del medio artístico. Era ver a un Leo que saltaba al tocar en el escenario como si el tiempo no hubiera transcurrido. Un hombre que presumía de su labor de productor en la capital cambió una noche genial en la incertidumbre de no saber qué hacer. Esa mirada siempre será de Leo y lo que sea para mejorar nuestro futuro. Es un hombre celoso de lo que ama y yo lo amo a él. La mirada de aquel día de invierno sólo para esperarlo y al verlo dedicarle la sonrisa que me provoca desde el primer día, descifrando cuanto lo he amado desde toda la vida, cuando debimos de haber estado juntos desde hace 8 años. Sólo de él. No soportaría vivir sin él. Caminaba atrás de él, escuchando, hiriéndome, rompiéndome, bloqueándome, dejando ir. Aunque se enoja, siempre regresa a mí. Jamás me iré de él. 

El último día perfecto. La tarde que nos hacía falta para los dos, su voz me estremece como una descarga eléctrica qie hace vibrar el corazón, sus caricias y sus besos profundos. Deseo esto para toda mi vida. Salir a comprar mandado, correr por los pasillos, abrazarlo y besarlo, y llegar a la casa y cocinar como si fuera algo de todos los días y disfrutarlo. Un día perfecto, porque todo es perfecto cuando está él.