8.4.20

A Chuy, con todo el amor que no vió

Han pasado tres días desde que dejé a Chuy. No sé de dónde saqué valor para recoger mis cosas e irme. Desde entonces lloro mucho, él al parecer no tiene motivación de buscarme.

Mensaje a Carina:
"Yo lo amé mucho. Le di todo a mi alcance, tiempo, disposición, cariño, apoyo moral y económico. 

Sé que no fui la persona más fácil pero no creo haberle hecho mal en su vida. Le perdoné que me haya sido infiel, le perdoné sus equivocaciones y groserías. Traté con todas mis fuerzas de hacerlo feliz, de que sus días fueran alegres, de hacerlo sonreír. Lo abracé todo lo que me permitió. Lo llené de besos todos los días. Cocinaba para él con mucho cariño. Traté de apoyarlo para que fuera el papá presente que dice que quiere ser para sus dos hijos, los cuidé con amor y traté de ser maternal en la medida que su familia y su ex me permitieron. Aguanté humillaciones de su ex y me dolió mucho que nunca me defendió. Aprendí a tratar con su personalidad tan seca y procuraba escucharlo y alentarlo a ser mejor.

Tal vez fui muy sentimental, muy dramática como él decía, muy intensa o muy empalagosa, pero jamás pensando en perjudicarlo. Me habría gustado que hiciera un esfuerzo por verme feliz, por abrazarme un poco más cada día, por darme más besos, por sonreír más. 

Yo pienso que no está feliz con su vida, siempre anda en otro mundo en su cabeza, tendía mucho a mandarme por un tubo o ignorarme. Siempre en el celular, siempre en la computadora. Y cuando se acercaba yo le exigía que fuese más cariñoso. A lo mejor en eso fallé. 

Y muy en el fondo sé que alejarme de él fue lo mejor para mí. Para dejar la oportunidad a alguien que me quiera intensamente, que me lo demuestre, que no tenga hijos para que no sienta que yo soy un impedimento para estar con ellos, que quiera ponerme como su prioridad y que le dé alegría verme sonreír. 

Le deseo mucha salud, alegría y todo lo bueno para que sea un papá amoroso, que sea exitoso en lo que se proponga, que valore más a las personas que lo quieren y que ojalá nunca nunca se vaya a sentir tan mal como me sentí yo. Me duele sentir que fallé, pero no fue así. Y espero que el día que se acuerde de mí le de una punzadita en la panza, que le recuerde que lo quise muchísimo, que me desvivía por él, que habría dado la vida por él, pero fue mayor su orgullo y me perdió."