Para poder seguir amándote debo entender que tienes que estar solita. Ya no somos "tú y yo", ahora sólo eres "tú". Y eso está bien. Quiero aprender a no vivir para ti, quiero vivir contigo.
Quiero aprender a amar tu nueva yo, la que no me necesita, la que esta para los demás, la que dejó de ser mío completamente. Esa nueva tú que te hace feliz.
Amarte como lo hago yo duele mucho. Te quiero para mí y sólo para mí. Te quiero para abrazarte todas las noches, para que me beses en todo momento. Para que te acurruques en mi cuello y hacerte caricias en tu cara. Para que me platiques todo y te rías de la nada. Para explicarte el mundo, para que te sorprendas, para que me digas que soy la única, que siempre antes de irte pueda sentir tu amor cuando me dices que me amas.
Ya no quiero necesitarte siempre. Quiero ser fuerte e independiente, quiero tener metas propias a corto y mediano plazo. Quiero salir y no sentirme vacía porque no estás. Simplemente quiero despegarme de ti como tú lo haces de mí.
No quiero todo de ti. Quiero tu amor, tu sonrisa y tus alegrías. Pero no quiero la ira y la incomprensión. Quiero verte bailar pero no con alguien más. Quiero que te quieran pero que te respeten y que respeten lo mucho o poco que nos queda. Quiero verte triunfar siempre, aunque no esté contigo. Quiero que seas una persona triunfadora y sobresaliente. Quiero que no abandones tus sueños. Quiero que no llores nunca más aunque sólo así puedas desahogarte. Quiero que desaparezca todo lo que te hace sentir mal.
Quiero desaparecer porque te hago más daño que bien. Ya no quiero estar contigo por ser la causa de tus desdichas.
Te amo más que a mi propia vida. Eres lo más hermoso que me ha pasado, la dicha más grande de este mundo... Y sé que nos queda poco tiempo. Vas a volar y no podré ir atrás de ti, vas a triunfar y sólo podré sonreirte a lo lejos.
No estoy siendo la persona que necesitas. Eres mucho más grande de lo que crees y requieres alguien a la altura de ti. Quiero disfrutarte todo lo que sea posible, antes de que te vayas. Voy a extrañarte tanto porque aún no te has ido y ya me siento morir. Voy a amarte muchísimo el resto del tiempo que quede. Pero espero sepas que siempre estaré orgullosa de verte crecer y lograr tus metas. Las olimpiadas no están cerca pero tu entusiasmo y voluntad te van a llevar más lejos. Tengo mucha fe en ti.
Te amo muchísimo. No tengo para describirte lo mucho que me encantas, lo hermosa que eres, la increíble mujer que te has vuelto: decidida, talentosa, hermosa, guapa, sensual, coqueta, independiente, luchadora, trabajadora, sexy, pero sobretodo invencible.
Te amo muchísimo. Nunca lo olvides. Y no te aferres a mí por cuidarme o porque creas que me necesitas. Eres muy valiente y despegarás tus alas sin ayuda. No me has necesitado en todo este tiempo, pero me alegro mucho de haber estado en aquellos momentos importantes.
Pero lo he pensado a lo largo del día. Yo puedo aguantar. Seré más fuerte, me enfrentaré a todo con valentía y paciencia. Yo quiero estar ahí y lo quiero lograr. Amarte debe ser mi motor de aguante. Te amo, lo vamos a superar juntas.