4.7.13

Gustavo

Yo sabía que soñaría con ellos, lo presentía, pero me desperté con una buena sensación. Paseaba con Israel pasando un buen momento, y cuando se fue a dormir me encontré caminando en un pasillo al exterior con vegetación a los lados acompañada de Gustavo. En sus mejillas se notaban unas heridas y tenía algunos golpes visibles. Me alarmé al verlo, preguntándole como estaba y más sorprendida porque en mi interior sabía que su estaba viendo a un espíritu. Lo abracé y sentí su cuerpo, escuché su respiración y su corazón, mientas me decía que todo estaría bien y que debía seguir mis instintos. No sé en que terminó la conversación, sólo sé que últimamente tengo a Gustavo en mis pensamientos. Abrázame por las noches cuando todos se hayan ido a dormir y regálame un poco de ti. Si tan sólo no hubiera dejado pasar el tiempo. Te estoy extrañando.