26.3.13
Casa sola
Así que esto es vivir sola. Aún no se habían ido y ya me sentía enajenada de la realidad. Llegada la hora, partieron de la casa, y se quedó solo la sombra de mi persona. Y pensé en todas las posibilidades. Imaginé varios escenarios. "¿Qué te parece si compro una botella, tu, yo, la noche entera... ?" Y podríamos pasar la noche platicando como antes. Me habría gustado tenerte cerca esta vez y aclarar todas esas tonterías que dijimos. Ahora es cuando más extraño tu presencia, mi subconsciente me repetía constantemente. Y por primera vez desde aquella noche, me puse la pijama que tu conociste. No lo había hecho no sé por qué, supongo que no estaba lista para enfrentarme a tu recuerdo. Y ahora que llega a mi, no eran cosas tontas, eran verdades que yo no quería reconocer. Tenías razón y yo insistí hasta alejarte. El único defecto que te encuentro es que tienes miedo. Pero él no te quiere, mi subconsciente está escribiendo en la pared de mis memorias. Y puede que así tenga que ser, que tengo que aprender a que nunca fue como creí. Solo vagas ilusiones. Casi dormidos y, sin embargo, con energías para abrazarme durante toda la noche. Quisiera que esas voces se callaran por lo menos unos días. Desconectarme un tiempo.